Atravesado por la Ruta Internacional N° 7, el departamento La Paz es el umbral de acceso este al Gran Mendoza.
Acostumbrada desde tiempos coloniales al tránsito constante de viajeros y cargas, con la Villa Antigua como posta excluyente de la zona en aquella época, La Paz es un eslabón en la circulación del Mercosur. El Arco del Desaguadero se ofrece al desfile incesante de vehículos en busca de sus destinos finales.
Entretanto, La Paz se enfoca en la producción de ganado bovino y caprino, y en pequeña escala al cultivo de la vid para vinificación y consumo en fresco, de frutales, hortalizas y alfalfa.
El hipnotismo que el sol practica sobre esta tierra sólo es roto por el ruido de motores de los 4x4, que utilizan para sus competencias el cauce seco que el río Tunuyán regala durante una parte del año.
Un alto en el viaje permitirá aprovisionarse en la Hostería del Arco, realizar consultas en la Oficina de Servicios Turísticos, y con algo más de tiempo, visitar edificios patrimoniales o acercarse a conocer la vieja estación del ferrocarril, primera estación mendocina que recibió la locomotora en 1883.
La Paz conserva y comparte sus más estimadas virtudes, la tranquilidad y la amabilidad de su gente.
Fuente: www.turismo.mendoza.gov.ar